*Según gremio de generadores térmicos, quieren arriesgar la confiabilidad del sistema en una ruleta sin tener en cuenta el riesgo de desabastecimiento eléctrico.
La Asociación Nacional de Empresas Generadoras, ANDEG, hizo un fuerte pronunciamiento sobre los efectos negativos, que para el sector eléctrico del país, tendría la aplicación de una resolución planteada por la Comisión de Regulación de Energía y Gas, CREG.
Según la agremiación, dicha medida pone en riesgo no solo el funcionamiento del mercado eléctrico sino la permanencia de las plantas de generación existentes, al plantear una modificación al esquema del Cargo por Confiabilidad que afecta la predictibilidad en las señales de inversión.
“Quieren arriesgar la confiabilidad del sistema en una ruleta sin tener en cuenta el riesgo de desabastecimiento eléctrico”, advirtió el director ejecutivo de la ANDEG, Alejandro Castañeda.
La Resolución que está en consulta es la número 133 de 2021 y su implementación constituiría un duro golpe a las plantas de generación térmica del país, que continúan brindando la confiabilidad y firmeza suficientes para asegurar el suministro eléctrico continuo ante la creciente demanda de energía que se presenta en el marco de la reactivación económica de Colombia.
De hecho, subraya la ANDEG, en lo corrido del año, las térmicas han aportado cerca del 17% de la generación durante 2021 y también a dinamizar el mercado de combustibles en el país, pues consumen más del 20% de la demanda nacional de gas natural, a la vez que aportan al desarrollo de la cadena del carbón en su condición de grandes consumidores de este energético (consumen cerca de 200.000 toneladas/mes) y en menor medida, a la cadena de combustibles líquidos.
Otro hecho relevante es que los niveles recientes de hidrología que se han registrado en el país permiten vislumbrar condiciones estables en la bolsa de energía, pues el promedio acumulado de aportes hídricos en meses recientes con relación con la media histórica ronda el 100%, lo que muestra, por un lado, que los usuarios del sistema cuentan con un mercado eléctrico eficiente desde la perspectiva de formación de precio, y por su parte, el país tiene una matriz eléctrica diversificada en el marco de la complementariedad entre las fuentes de generación.
LO QUE PRETENDE LA CREG
Según la Asociación Nacional de Empresas Generadoras, con el concepto de “esquema competitivo para asignación de obligaciones de energía firme a plantas existentes” se pretende hacer un concurso que pone en riesgo la confiabilidad del sistema, ya que para el caso de plantas existentes, que no cuentan con ingresos adicionales al Cargo por Confiabilidad, se motivaría una salida anticipada del mercado eléctrico.
Lo anterior, con un escenario de hidrología crítica y estrechez en el balance energético por cuenta del retraso en la entrada de proyectos, se pueden materializar riesgos en el suministro de energía en Colombia.
La idea es que si bien se observa que la demanda de electricidad en el país viene aumentando en algunos días de meses recientes, incluso por encima de las proyecciones de la UPME, existe incertidumbre en la oferta de energía de mediano plazo por el atraso de la mayoría de proyectos de generación próximos a iniciar compromisos de entrega de energía en el marco del Cargo por Confiabilidad, como lo es el caso de Hidroituango y los de fuentes renovables no convencionales que se conectan a la Línea Colectora..
La ANDEG sostiene que eso genera un escenario de estrechez en el balance de energía, en el cual el parque térmico del país se convierte no sólo en el “Plan B”, sino en la garantía de energía firme del país para asegurar la confiabilidad y respaldo del sistema eléctrico frente a una situación de hidrología crítica, para lo cual están llamadas las plantas térmicas.
Según la agremiación, la propuesta regulatoria, que no cuenta con análisis de impacto regulatorio, dejaría como consecuencia la afectación de la cadena de abastecimiento de combustibles en el contexto del desarrollo de contratos de largo plazo, reduciendo, por ejemplo, el mercado de gas natural, lo que a todas luces se traduce en un desincentivo a la inversión en el mercado de energía en Colombia.
EL IMPACTO ANUAL
Otra de las consideraciones de los térmicos tiene que ver con el impacto anual por concepto de lucro cesante en la cadena de abastecimiento, al igual que en las finanzas regionales por cuenta del menor pago de contribuciones e impuestos, ante la eventual salida de plantas de generación del sistema eléctrico ubicadas en algunas regiones del país.
“No es coherente que por un lado el Gobierno Nacional presente al sector como el plan B para brindar el respaldo y confiabilidad al sistema, y por otro lado esté en consulta una resolución desde la CREG con la cual se pone en riesgo la sostenibilidad de las plantas en el corto y el mediano plazo, al plantear esquemas que van a subremunerar a las plantas de generación existentes, haciéndolas financieramente inviables y forzándolas a salir del mercado, sobre todo en un contexto en el cual el sector enfrenta retos importantes de cara a la transición energética”, sostiene Alejando Castañeda.
El director ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras, asegura que esto significa que van a arriesgar la confiabilidad del sistema en una ruleta sin tener en cuenta el riesgo de desabastecimiento eléctrico.
LAS PROPUESTAS
Ante el citado escenario, para ANDEG es fundamental proteger los pilares del mercado eléctrico, evitando la implementación de instrumentos que pueden romper el adecuado funcionamiento de este.
Así las cosas, propone llevar a cabo un análisis completo de costo – beneficio y de impacto regulatorio de la propuesta normativa, considerando escenarios energéticos, de formación de precio de energía, y sus efectos sobre la cadena de electricidad y de gas natural.
Adicionalmente, es muy importante revisar la propuesta en el marco del balance del mercado de energía del país, asegurando una discusión regulatoria integral, considerando la confiabilidad, calidad y continuidad en la prestación del servicio de energía en Colombia, teniendo en cuenta las señales de inversión.
“Todo esto en línea con los estudios incluidos en la hoja de ruta de la Misión de Transformación Energética que contribuyan a la reactivación económica en el contexto de la sostenibilidad de la cadena de prestación del servicio en el país y atendiendo a las necesidades que la actual coyuntura presenta donde el parque térmico sería el plan B para continuar brindando la energía que el país necesita” puntualizó Castañeda.
Más historias
Air-e intervenida emitió facturas sin excluir opción tarifaria, pero subsanará el error
Sirius, eventual solución en el mediano plazo que no resuelve presiones actuales: Anif
Llegaron los aerogeneradores para proyecto eólico de Celsia en el Atlántico