El emblemático Hotel El Prado de Barranquilla habría sido objeto de robos continuados que sumarían 10 mil millones de pesos, según la denuncia hecha por el consorcio FTP, que puso en conocimiento de la justicia tales anomalías y este martes 5 de abril las dio a conocer ante los medios de comunicación de la ciudad.
Los hechos delictivos se habrían producido entre los años 2016 y 2017 en desarrollo del proceso restaurativo del señalado inmueble, y se sindica directamente, entre otros, a Jaime Espinosa Rosado, quien se desempeñó como representante legal suplente.
El detrimento se habría dado mediante apropiación de dinero en efectivo recaudado por pago de servicios y ventas ofrecidas por el hotel, actos de colusión con proveedores y suscripción de contratos encaminados a afectar el patrimonio económico de El Prado.
Bianith Bohórquez Pinto, apoderada del consorcio FTP, que tiene a su cargo el señalado hotel, afirmó que “dentro de todo este detrimento patrimonial que ha sufrido quien hizo la inversión alcanzaría la suma de los 10 mil millones de pesos, como pérdidas a causa de esta defraudación y del abuso de confianza claro y expreso en cada una de las denuncias”.
Manifestó que “las denuncias fueron interpuestas posterior al conocimiento de las distintas auditorías. Lo que hay que tener claro es que uno no espera que sea directamente el representante legal quien empiece hacer mal uso o una administración irregular, lo cual condujo a que se hicieron múltiples investigaciones y auditorías que arrojaron estos resultados que fueron los que terminaron en las denuncias presentadas en los años 2019 y 2020 y la última que se interpuso fue la del año pasado”.
ALGUNOS CASOS
Entre los presuntos ilícitos hallados, la abogada Bianith Bohórquez Pinto mencionó pagos por cuantía de $17.785.655 a la firma Escalin Ingeniería S.A.S. y por $16.770.681 a Cecil Alfonso González Díaz. Aseguró que “las facturas corresponden a los mismos conceptos, es decir, se realizó una doble facturación de unos servicios eléctricos que no fueron realizados por ninguna de las dos empresas facturadoras”.
Dijo que “entre muchas de las circunstancias que rodearon las distinta irregularidades y elevados costos a los que se dio lugar por parte de todos los contratistas en las distintas áreas, se evidenció que muchos de los trabajos no estaban en buen estado y se hizo necesario contratar un Arquitecto Restaurador, quien encontró hallazgos que dejaron ver que en todo el proyecto se hizo un gasto exorbitante, defraudando las arcas del Consorcio FTP”.
También se refirió al suministro e instalación de la red contra incendio, por parte de la sociedad Escalin Ingeniería S.A.S. Sobre el particular afirmó lo siguiente:
“Al momento de hacer la respectiva inspección de rigor a dicha red se encontró en la torre ejecutiva varios errores constructivos, los cuales de forma clara colocaron en riesgo la vida de las personas que hicieron uso de la edificación, la cual debido a su actividad comercial aglomera a un gran número de personas”.
Agregó: “El hallazgo más significativo y que nos lleva a pensar que existió mala fe por parte del constructor es la instalación de una bomba de usos generales, la cual originariamente es de color verde y para hacerla parecer una bomba certificada para un sistema de extinción de incendios, fue pintada artesanalmente de color rojo, el cual con el pasar de los años fue desapareciendo dejando en evidencia el engaño, fraude e irresponsabilidad, por el grado de peligro al que fueron expuestos todo el personal humano y la edificación histórica y patrimonio cultural como lo es el Hotel El Prado, entre otras irregularidades y por dicho trabajo se cobró una suma exorbitante”.
Más historias
Rescatan bus en la calle 85 tras quedar ‘atrapado’ en el arroyo
Por receso escolar, autoridades en Barranquilla aumentarán actividades preventivas y de control
Gobernación y alcaldes del Atlántico firmaron acuerdo para activar Red de Municipios Sostenibles