En abril la actividad económica comercial se ve afectada por las lluvias que azotan a todo el territorio nacional. Sin embargo, el balance global de acuerdo con la Bitácora Económica de Fenalco es positivo. Un 46% de los empresarios consultados reportó aumento en sus cantidades físicas vendidas frente a las registradas en abril del año anterior. Un 35% dijo que fueron muy similares y para 9% disminuyeron.
En abril del año pasado las ventas del comercio minorista del corte moderno crecieron 75% frente a las de igual mes del fatídico año 2020 cuando se encontraba en total confinamiento.
“El crudo invierno hace que muchas personas sientan menos deseos de salir de compras y a vitrinear y ello lo percibieron gerentes de varios centros comerciales de vanguardia”, dijo Jaime Alberto Cabal presidente de Fenalco.
Añadió que en las ciudades de mayor tamaño las personas buscan llegar más temprano a sus hogares evitando las congestiones vehiculares que se incrementan por las lluvias. Además, los afiliados del ramo farmacéutico confirmaron que en las últimas semanas se ha elevado la ventana y gripales.
Las ventas del clúster moda que incluye vestuario, calzado, ropa deportiva y morrales si bien cerraron en abril en terreno positivo experimentaron cierto freno en su desempeño.
De acuerdo con la encuesta, la Semana Santa impulsó el consumo de gasolina y lubricantes y las ventas de lo que se denomina rancho y licores, aunque por el invierno el consumo de refresco se ha visto desfavorecido.
Según Fenalco, en el sector de ferreterías y materiales de construcción se percibió igualmente una pérdida en el impulso a lo que se suma la escasez de muchos productos que por lo general se importan de China.
“Los comerciantes de alimentos y víveres están enfrentando la dura realidad de tener un mayor volumen de mercancía agotada en sus góndolas como consecuencia el desabastecimiento de materias primas y bienes terminados”, precisa Cabal.
De igual manera la Bitácora destaca este mes un tema que ha venido tomando auge en Colombia. Se trata de la reduflación, proceso en el que las mercancías se reducen de tamaño o cantidad, mientras que los precios se mantienen igual o suben; todo esto como resultado de la inflación que atraviesa el país.
En cuanto a las expectativas inmediatas, el 45% de los consultados por Fenalco piensa que las cosas seguirán mejorando y un 13% se declara pesimista.
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