febrero 9, 2025

Kelly Johanna Sánchez, Gerente Comercial Equinorte en Barranquilla

EQUINORTE, una gran familia, una empresa con corazón

EL NORTE y elnorte.com.co dialogaron con empleados de Equinorte, quienes coincidieron en que esta compañía es más una familia en la que se siente mucho apoyo y solidaridad. Y la consideran una empresa con corazón.

Kelly Johanna Sánchez Betancur, Gerente Comercial Equinorte en Barranquilla

El último día, de su último semestre de Ingeniería en el Politécnico de la Costa Atlántica, es inolvidable para Kelly Johana Sánchez Betancur, quien hoy ocupa la Gerencia Comercial en la sede Barranquilla de Equinorte. El próximo año cumple 20 de hacer parte de “esta gran familia”, como la define.

Kelly cuenta que, en su época de estudiante en el Politécnico de la Costa Atlántica, para poder reunir los pesos de cada semestre logra que le permitieran vender empanadas, hojas para fotocopias, CD, entre otros elementos que necesitaran los estudiantes, y de estar pendiente de los requerimientos en las salas de cómputo.

Guillermo Cepeda, presidente y socio de la compañía, fue su profesor en la clase Desarrollo y Evaluación de Proyectos en la carrera de Ingeniería de Sistema en el Politécnico de la Costa Atlántica.

Kelly destaca que el profesor Cepeda era uno a los que le ‘fiaba’ las empanadas que ofrecía en una caja de icopor en la entrada del Politécnico.

“El me fiaba, entonces yo le decía: No tranquilo usted me paga después no se preocupe, mire son de queso, son de carne, yo le ofrecía el producto”, recuerda.

Un día el profesor Cepeda le comentó que en la empresa Equinorte estaban necesitando una recepcionista, que se le midiera. Kelly hizo las pruebas psicotécnicas, a pesar de sentir que no era compatible con lo que estaba estudiando.

El último día de clases y despedida del semestre, el profesor Cepeda informó al grupo que se llevaba a su empresa a una de sus alumnas, Kelly Johana Sánchez.

Hoy, recuerda las enseñanzas que fue acumulando en Equinorte, “como una esponja”, de sus jefes inmediatos, de sus compañeros de trabajo, de consultores, capacitarse en el mercado de los materiales para construcción que es la esencia de la compañía, el manejo de personal y de clientes, liderazgo empresarial, viajar por regiones del país y varios países del mundo, entre otros peldaños.

“Todas las cosas se fueron dando gracias a Dios y ahora tengo más de un año en el puesto de la Gerencia Comercial y sigo y trabajando, creciendo. Equinorte es una empresa con corazón y para mí esa frase lo encierra todo”, concluye Kelly al compartir su experiencia.

José Daniel Rivera, Jefe de Operaciones en la sede Barranquilla

Más que una empresa como tal, José Daniel Rivera considera a Equinorte como el espacio integral en el que se labora en armonía, se aprende, se crece y se supera de manera permanente.

En su caso dice que “ha sido un camino de mucho aprendizaje y crecimiento. De madurez en los procesos por cuantos he pasado. Porque yo ingresé aquí siendo supervisor; luego fui líder de área, luego director; seguimos creciendo y aprendiendo todos los días. Yo diría que ha sido un camino de mucho éxito, acompañado de mucho aprendizaje”.

José Daniel, quien en noviembre cumple 10 años de hacer parte de la familia Equinorte, destaca que “cuando uno necesita el empujón se lo dan, cuando necesita la ayuda se la dan, cuando debe aportar más de lo que debes también lo hacen, sin escatimar nada. Digamos que aquí, en esta familia, no escatimamos ningún esfuerzo ni nada, porque sé que la empresa también lo ha hecho con nosotros; todos vamos hacia delante, con empuje”.

También resalta el esmero por brindar calidad de vida a cada trabajador, que no solo se traduce en el pago del salario sino todo lo que se le aporta, siguiendo el lema que caracteriza: ‘Una empresa con corazón’.

“He visto personas que han entrado como auxiliares y ahora son directores de una agencia. He visto personas que no tenían nada y ahora tienen su casita, su familia. He visto personas que han necesitado ayuda y la han conseguido. Lo integral es la parte que resalto de la empresa”, manifiesta Rivera, el responsable de la logística.

Dagoberto Ruiz, Supervisor de Planta Equinorte Barranquilla

“He cumplido varios sueños, gracias a esta empresa”, destaca Dagoberto Ruiz, quien, de ayudante de camión, como fue su ingreso a Equinorte, luego de superarse con estudios universitarios, hoy es Supervisor de Planta en la sede Barranquilla.

Ruiz reafirma que la compañía para él representa felicidad porque le cambió su vida. “Llegué aquí en cero, sin ser profesional, hoy soy un profesional, a parte tengo mi propia casa. He cumplido varios sueños gracias a esta empresa”, dice.

Resalta el impulso que los directivos de Equinorte les dan a proyectos para el bienestar de los trabajadores y de sus familias, lo cual debería multiplicarse por parte de otros empresarios. Entre los estímulos destaca el apoyo para adquirir vivienda propia y el desarrollo de estudios universitarios.
En su caso, fue clave el respaldo para lograr el título de Ingeniero Industrial en el Politécnico de la Costa Atlántica, lo que le abrió el camino hacia la superación personal y ascender laboralmente.

“Equinorte es una familia de verdad y que siempre vela por el bien de sus trabajadores. Hoy muchas personas contamos con ese beneficio y de verdad, muy agradecido con esta empresa, que le dio un giro a mi vida de180 grados”, anota.

Alexis Castro, Empleado del Área de Alistamiento

Alexis Castro no espera terminar que le pregunten cuánto le pondría, de uno a diez, a la compañía en la que lleva 20 años para responder… “¡Le pongo 100!”, dice en medio de una risa llena de orgullo y satisfacción.

Él hace parte del grupo de empleados del Área de Alistamiento que debe estar atento al buen funcionamiento de los equipos dispuestos por Equinorte para su exigente clientela en el sector de la construcción, no solo en Barranquilla, sino a nivel nacional.

Destaca, sobre todo, la solidaridad que se respira en el ambiente laboral. “Todos aquí nos ayudamos; los beneficios que tenemos con la empresa; el apoyo que nos dan los jefes; eso nos hace sentir bien”, comenta.

Lo anterior lo relaciona con la dura experiencia que tuvo que afrontar con el nacimiento de sus dos hijas por las complicaciones que registraba su esposa. “Hoy, gracias a Dios, a mí trabajo, y a la compañía, porque ellas tuvieron un nacimiento bien teso. Ahí están mis hijas, una con 20, y otra con 16 años”.

Otra de sus experiencias vividas que llenan de satisfacción a Alexis es haber hecho parte de los escogidos para ir a inspeccionar una maquinaria que la empresa adquirió en las ciudades de Dubái y Abu Dabi, en Emiratos Árabes Unidos. “Duramos una semana…”, comenta de manera espontánea.

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