febrero 8, 2025

CCI califica como politiquería barata y oportunismo saboteo en el Peaje de Turbaco

Como “una politiquería barata y del oportunismo irresponsable de unos pocos que pueden frustrar el desarrollo vial de la Costa Norte”, calificó Juan Martín Caicedo, presidente Ejecutivo de la Cámara de la Infraestructura (CCI), la situación en torno al peaje de Turbaco.

“Sería inadmisible, por lo demás, que una postura radical e intransigente de un grupo aislado, termine por anteponerse al progreso del país”, expresó el presidente de la CCI.

El gremio se refiere a la radical e inadmisible postura del denominado ‘Comité No Más Peaje’, que, “a la luz de argumentos tan rebatibles como deleznables, exige el desmonte inmediato de la caseta del peaje de Turbaco , ubicada en el proyecto vial Ruta Caribe II que conecta en doble calzada a Cartagena con Barranquilla”.

Ante ello, la CCI expresa que la Ruta Caribe II, es un proyecto vial concesionado que hoy garantiza el óptimo estado de 253 km de vías en los departamentos del Atlántico y de Bolívar, pero que además contempla la ejecución de 79 km de segundas calzadas, 16 km de variantes en las cabeceras municipales y casi una decena de nuevas intersecciones. Advierte que esto podría quedar en el limbo si la desmedida petición del ‘Comité no más peaje’, en el sentido de desmontar el peaje de Turbaco, prospera.

Juan Martín Caicedo, presidente Ejecutivo de la Cámara de la Infraestructura (CCI).

El gremio afirma que si ello ocurre la iniciativa vial se vería enfrentada a serios inconvenientes para garantizar su cierre financiero. A tal punto que la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, podría optar por liquidar de manera anticipada el contrato, decisión que solo traería consigo una andanada de consecuencias tremendamente nocivas para la conectividad, la competitividad y el desarrollo de la Costa Caribe.

Dentro de las secuelas que acarrearía la terminación del contrato, Juan Martín Caicedo mencionar que cerca de 4.800 empleos directos y 2.700 indirectos que son, justamente, los que contempla generar el proyecto, quedarían en jaque. De igual manera, aumentaría la inseguridad de la vía, se ralentizaría la dinámica económica de los municipios que atraviesa y, no menos preocupante, habría una reducción cercana al 40% en los tiempos de desplazamiento entre las capitales del Atlántico y Bolívar.

Para evitar que todo lo anterior ocurra, la propia ANI ha planteado el no cobro del peaje durante un año a los vehículos pertenecientes a las categorías I y II, mientras se analizan alternativas que permitan llegar a acuerdos definitivos, reubicar el peaje y continuar con el proyecto. Propuesta que se constituye, sin duda alguna, en una salida sensata y que ha recibido el respaldo irrestricto de la CCI pero que, infortunadamente, no ha sido aceptada por el ‘Comité No Más Peaje’.

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