Las cifras agridulces de la pobreza en Barranquilla

Si bien la cifra de pobreza monetaria en Barranquilla se redujo en 2022, la de pobreza extrema no sólo se mantuvo, sino que aumentó levemente.

En Barranquilla, el año pasado en comparación con 2021, salieron de la pobreza monetaria 62.753 personas, de acuerdo con las recientes cifras dadas a conocer por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, Dane.

Los datos indican que la incidencia de pobreza monetaria en Barranquilla pasó de 39,4% en 2021 a 35,5% en 2022. En cuanto al número de personas, se pasó de 776.339 barranquilleros en esta condición en 2021 a 713.586 personas en igual condición en 2022.

En la capital del Atlántico se incrementó la incidencia de pobreza monetaria extrema. Aunque levemente, pasó de 10,8% en 2021 a 10,9% en 2022. Las personas en Barranquilla en pobreza extrema pasaron de 212.594 a 217.254, es decir 4.660 barranquilleros entraron en esta condición.

La medición del Dane indica que una persona se encontraba dentro de la pobreza monetaria en 2022 si su ingreso per cápita era de $396.864. En el caso de un hogar de cuatro personas, este ingreso era de $1,5 millones.

En cuanto a la pobreza extrema el ingreso per cápita es de $198.698 y en el en el caso de un hogar de cuatro personas fue de $794.792.

En el caso de Barranquilla y Soledad, el ingreso per cápita en la línea de pobreza monetaria fue de $409.913 y en la de pobreza extrema de $210.265.

La fórmula

El ingreso per cápita de la unidad de gasto es el resultado de dividir el ingreso corriente disponible de la unidad de gasto entre el número de personas que la conforman.

En lo que respecta al coeficiente Gini, que mide niveles de desigualdad, en Barranquilla pasó de 0,50 a 0,49.

El alcalde Jaime Pumarejo destacó la reducción de la pobreza monetaria en la Ciudad y expresó que se trata del resultado un trabajo social en conjunto, identificando las necesidades de las comunidades y dando prioridad a la solución de problemáticas. Indicó que la reducción es jalonada además por la reactivación económica.

Pobreza en el país

Cabe indicar que Barranquilla y su área metropolitana registra menores cifras de esta problemática que el nivel nacional, pues en Colombia la pobreza monetaria se situó en 36,6% en 2022 y la extrema en 13,8%.

La cifra de 36,6% representa en el nivel país una disminución de 3,1 puntos porcentuales (p.p) frente a 2021, cuando fue del 39,7%.

En el total nacional, 18.331.941 personas estaban en situación de pobreza monetaria y en 2021 había 19.634.410 personas en esta situación, de manera que 1.302.469 personas salieron de esta condición.

Por su parte la pobreza monetaria extrema en el país a ligual que en Barranquilla subió ligeramente 0,1 puntos porcentuales, pasando de 1,3,7% a 13,8%. Informa el Dane que 130.907 personas entraron a la pobreza monetaria extrema en 2022, pasando la cifra de 6.773.594 en 2021 a 6.904.501 en 2022.

Ante estas cifras, la Asociación Nacional de Empresarios, Andi, ha venido proponiendo que haya un rediseño de toda la política de superación de pobreza que se hizo en 2010, la cual se aplicó y tuvo muy buenos resultados, pero la realidad hoy en día no es la misma.

“Debe darse una reingeniería de la política de superación de pobreza que nos permita acelerar este objetivo dentro de los objetivos más importantes de la Nación. Para eso, nosotros le hemos ofrecido el concurso nuestro, que además trabajamos en eso en el pasado, al gobierno nacional para poder concentrarnos todos en tratar de sacar adelante este que tiene que ser un objetivo nacional”, expresó Bruce Mac Master, presidente de la Andi.

El dirigente gremial señaló que es muy importante generar empleo formal, dado que “el empleo informal es una forma de reproducir y de perpetuar la pobreza porque genera trabajadores que no tienen derecho a un contrato, que no tienen derecho a las horas extras, que no tienen derecho a la jornada, no tienen derecho a la pensión, y es una forma terrible de perpetuar la pobreza dentro de los colombianos”.

Por eso los empresarios dicen que hay que ser muy cuidadosos con las reformas, porque una reforma mal hecha podría aumentar la pobreza. “Si hay algo en lo que los países se ven muy afectados cuando tienen índices de pobreza altos, es justamente en términos de empleo y en términos de salud, entonces las reformas tienen que ir realmente armonizadas a todas las políticas de reducción de pobreza y de reducción de la inequidad de nuestro país”, puntualizó Mac Master.