La tormenta política originada por la propuesta del presidente Gustavo Petro, en el sentido de usar la figura del fast track para la implementación del acuerdo de paz con las FARC-EP, apenas comienza y pareciera que en los próximos meses esta iniciativa será cada vez más tortuosa.
Este mecanismo en esencia garantiza que se acorten los tiempos para la discusión y aprobación en el Congreso de la República de los proyectos que presente el Gobierno Nacional, que en teoría serían los relacionados con dicho acuerdo.
Esta propuesta la planteó el jefe de Estado durante su intervención ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), lo mismo que una ampliación de 7 años al plazo previsto para implementar el señalado acuerdo. La comunidad internacional ha dado su respaldo a esta iniciativa.
“El Acuerdo de Paz no produjo un acuerdo nacional, no fue posible hacer el pacto nacional del que habla y que se ha colocado ante ustedes como una declaración unilateral de Estado. Un compromiso de Colombia ante la humanidad”, expresó Petro al justificar las razones por las cuales acude a esta herramienta.
En Colombia diferentes voces se han expresado en contra de la utilización del fast track, aduciendo que se trata de un pretexto de Petro para que con este mecanismo el Congreso le apruebe las reformas que hasta el momento siguen estancadas.
Incluso dicen que como el Congreso no le ha dado vía libre a tales reformas, el presidente ha amenazado con una Asamblea Nacional Constituyente, luego con un referendo, el Poder Constituyente y ahora el fast track, con lo cual la oposición ha puesto el grito en el cielo.
Plan para aprobar reformas del gobierno
Uno de los que se ha opuesto de inmediato es el expresidente, Álvaro Uribe, quien afirmó que esta clase de mecanismos son “acomodos para aparentar como constitucional lo que no es”.
El también expresidente, Iván Duque, rechazó de manera enfática la propuesta, indicando que se enmarca en un plan para sacar adelante las reformas del Gobierno a través de lo que llamó “mecanismo espurio” que a su juicio tiene como fin “debilitar el trámite legislativo”.
Advirtió que con el fast track, el gobierno buscaría impulsar sus reformas en diferentes aspectos, presentándolas como mecanismos vinculados al proceso con las Farc para decir que son parte de la implementación del acuerdo con este grupo subversivo. “Buscan que, bajo el fast track se reduzcan los tiempos en la agenda legislativa y puedan imponer la agenda del gobierno”, aseguró Duque.
La respuesta de Petro a tales afirmaciones las hizo a través de su cuenta de X, expresando lo siguiente: “Yo te invito, Duque, a construir un acuerdo nacional para hacer realidad la paz de Colombia. Nuestra sociedad está cansada de la sangre derramada. ¿Qué de malo tiene que nuestro campesinado viva bajo un Estado Social de Derecho?”
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