El Gobierno Nacional se la jugará para sanear las finanzas de la empresa Air-e intervenida, con miras a crear las condiciones para garantizar el servicio a los usuarios con tarifas reducidas.
En ese orden de ideas, ha sido trazado un plan de acción para que esta compañía, manejada hoy por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, salga de sus problemas financieros.
El primer objetivo será conseguir recursos para que la empresa distruidora y comercializadora de energía en los departamentos de Atlántico, Magdalena y La Guajira, pague la deuda que tiene con los generadores.
En una reunión realizada en las últimas horas, con presencia de los ministros de Minas y Energía, y Hacienda, Andrés Camacho y Ricardo Bonilla con el agente especial interventor, Edwin Palma, se definió una ruta en ese sentido.
Se conoció que por instrucción del presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, será explorada la alternativa de la consecución de recursos que estarían por el orden de los 400 mil millones de pesos, garantizados por el Fondo Nacional de Garantías.
Otra de las medidas apunta a una mayor compra de energía a largo plazo, con diferentes generadores, a fin de reducir al máximo la exposición de la empresa en la bolsa de energía.
De inmediato el agente interventor a entrado en conversaciones con algunas generadoras, entre ellas Isagen y EPM.
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