Bajo la premisa de trabajar unidos y pensando en grande se firmó la alianza Caribe Potencia Energética

Este viernes se firmó en Barranquilla la alianza Caribe Potencia Energética, con el objetivo de materializar el gran potencial que tiene la región, en pro de su desarrollo y de la gente.

De la Alianza forman parte el sector público, privado y la academia, con el apoyo del Grupo Prisa, y el llamado es a trabajar unidos y pensando en grande por un mismo objetivo: la transición energética con la que todos los actores están comprometidos, pero una transición energética a la colombiana y que no destruya el presente pensando en el futuro.

El ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, dijo que hacer la transición energética a la colombiana implica planear a la colombiana y ver cuáles son las características de un país y de una región como el Caribe ubicada en un contexto global de una crisis climática.

“¿Qué hacer ahí?, pues indudablemente tenemos que estudiar más lo que esto ocurre”, dijo el ministro refiriéndose a la crisis climática mundial y precisando que una de las regiones con mayores vulnerabilidades climáticas es el Caribe.

“Necesitamos más información, más datos para lograr predecir lo que nos está ocurriendo, para lograr tomar acciones, lograr políticas públicas adecuadas al momento que estamos viviendo”, expresó Camacho.

Dijo que hay que centrar el tema en cómo aprovechar al máximo la riqueza del Caribe. “El potencial del Caribe es total, tienen agua, tiene sol, tiene viento, incluso en el marco de la crisis climática, que tenemos que superar la dependencia con los hidrocarburos, incluso en ese escenario también sabemos que hay carbón y hay gas”, anotó.

Señaló que con todo ese potencial que tiene la región no se entiende por qué tiene la tarifa de energía más alta. En ese sentido dijo que eso es algo que se tiene que resolver. “La transición energética justa no puede ser justa si aquí se siguen pagando esas tarifas y la respuesta no es solo regulatoria, la respuesta no es solo dinero, no es solo pagar los subsidios, no es solo pagar la opción tarifaria, la respuesta es más energía económica, eficiente y barata y esa es la energía del sol, es la energía del viento”, anotó.

“Hacer la transición energética implica también para el Caribe el reto de resolver una crisis tarifaria y una crisis social. Tenemos la responsabilidad de hacer la transición energética a la colombiana para resolver también esos asuntos”, aseveró.

Aprovechar al máximo el potencial

En el acto de instalación de este evento que se cumplió en el Cubo de Cristal, el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano destacó que la energía eléctrica es un recurso esencial para el crecimiento económico y la mejora de la calidad de vida, pero también es un bien finito. “Debemos aprovechar al máximo nuestro potencial energético promoviendo la generación de energías renovables y optimizando el uso de la energía existente”, precisó.

Sostuvo que la ubicación geográfica privilegiada del Caribe colombiano brinda una oportunidad única para ser un hub energético regional. Sin embargo, expresó que para aprovechar este potencial es necesario acelerar la ejecución de los proyectos de generación y de infraestructura eléctrica.

“Los inversores están dispuestos a apostar por nuestras regiones, pero necesitan mayor certidumbre, condiciones favorables para hacer realidad sus proyectos. La alianza que hoy firmamos implica un compromiso firme de todos los actores involucrados para construir un sistema eléctrico eficiente, confiable y sostenible. Debemos trabajar de manera coordinada para superar los desafíos que enfrentamos y aprovechar las oportunidades”, dijo el gobernador Verano del Caribe, agregando que en ese sentido, los gobernadores de la región se han unido para impulsar la denominada Gestora de Energía del Caribe, cuyo propósito es promover proyectos de energía renovable que permitan acelerar la transición en el país.

La presidente de Acolgen, Natalia Gutiérrez, dijo que “gracias a esta gran convocatoria estamos hoy dando inicio a un proceso transformador, que exalta el enorme potencial que tiene la región Caribe en términos de energía, y que puede no solo impulsar el desarrollo local, sino también convertirse en un motor para el desarrollo del país”:

Expresó que la región Caribe cumple un rol fundamental dentro del sistema aportando energía confiable con una capacidad instalada que representa cerca del 23% del total del país en solo esta región.

Añadió que también es una región de oro para la transición energética. “Estamos ante una oportunidad gigantesca de ser los mayores productores de energía renovable y esto nos hace pensar que aquí es donde tenemos que poner el foco y poder utilizar los vientos y la radiación solar que es sobresaliente”, aseguró.

A trabajar en medio de la desconfianza

En la conclusión del evento, Frank Perl, presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP), dijo que Colombia ha sido a lo largo de 200 años de historia un país dividido en lo social, en lo político, en lo económico y en lo humano.

Afirmó que es hora de cambiar eso y de entender que esos cuellos de botella que se ven en el sector energético se explican por una mala interpretación de lo que son los intereses diversos y los conflictos.

“Si queremos que Colombia realce su potencia y si queremos que el Caribe sea una potencia energética, tenemos que redefinir la manera como interpretamos los conflictos”, expresó Pearl.

Invitó a trabajar en medio de la desconfianza, poniendo la intención y el esfuerzo en los procesos y las instituciones para lograr ejecutar planes que lleven a que el Caribe sea una potencia energética.

“La propuesta que nosotros tenemos es que hagamos una transición a la colombiana… y esa transición puede tener tres ejes, una transición energética, una transición económica y una transición social. Una transición que nos lleve conjuntamente como sociedad a definir un modelo económico y a crear un consenso social”, manifestó el presidente de ACP.

De acuerdo con el ejecutivo, una transición energética a la colombiana tiene que entender que sobre todo se necesita garantizar el suministro y tener seguridad y soberanía energética. “Hay que utilizar los hidrocarburos y los recursos de la minería para financiar la adopción de tecnologías”, precisó.