Se conocen las identidades de cuatro de las víctimas fatales de la intoxicación con licor adulterado en Barranquilla

Helmot Enrique Escolar Sotomayor, de unos 30 años, quien se ganaba la vida como reciclador y también realizaba labores de cargue y descargue de camiones en el mercado de Barranquilla, es una de las nueve víctimas mortales de la intoxicación masiva con licor adulterado que se registró en Barranquilla.

Escolar vivía solo en el sector de El Boliche, pero solía visitar a su familia y ayudar a su madre con lo poco que ganaba trabajando. La noticia de su muerte le llegó a sus a su madre la madrugada de este miércoles cuando se encontraba abriendo un pequeño negocio que tiene en el barrio San Roque.

“Inicialmente nos dijeron que había sufrido una sobredosis, pero luego confirmaron que fue por una intoxicación con licor chimbo”, dijo un allegado a la víctima.

Además de Escolar, la Policía Metropolitana reportó como fallecidos a José Felipe Crespo Ortiz, Emiro Alberto Miranda y a Nicolás Manuel Medrano, este último señalado por las autoridades como la primera víctima mortal y quien habría sido el encargado de elaborar la fatal mezcla de licor con alcohol de madera, para venderla en botellas plásticas por un valor de solo de $2.000.

El general Edwin Urrego, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, precisó que, en medio de los operativos para retirar todo este licor de las calles, lograron ubicar el sitio donde se fabricó, encontrando dos pimpinas llenas. “Logramos llegar al lugar, un sitio en condiciones lamentables de salubridad, donde hallamos dos pimpinas y restos de botellas de plástico”, indicó el oficial.

La tragedia ha dejado luto entre trabajadores y comerciantes del del mercado de Barranquilla, donde laboraban la mayoría de las víctimas. Estas personas eran consumidoras frecuentes de este tipo de licor, sin que se midieran los riesgos.

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