Barrranquilla, rumbo al colapso: empresario Samuel Tcherassi, amigo de Char

En unas sorpresivas declaraciones, el empresario barranquillero Samuel Tcherassi, amigo de infancia de Alejandro Char Chaljub, cuestionó duramente el modelo que viene aplicando el alcalde, indicando que llevará la ciudad al colapso.

A juicio del hermano de la diseñadora Silvia Tcherassi, la estrategia de los créditos fue válida en su momento para apalancar, pero hoy no.

“Para mí la ciudad se va a colapsar. El sistema actual te lleva al colapso, no hay manera que no colapse. Este es un modelo válido para arrancar, porque toda industria necesita apalancarse, pero nos quedamos con la costumbre de apalancarnos. Nos quedamos ahí”, expresó el empresario, propietario de Epeka.

Es bueno recordar que hoy Barranquilla tiene una deuda de 3 billones de pesos y paga anualmente 700 mil millones de pesos en préstamos e intereses.

Samuel Tcherassi, quien fue contratista de la segunda Alcaldía de Char, le dijo a La Silla Vacía que coincide con el expresidente de Promigas, Antonio Celia, en el sentido que los recursos son finitos.

Las privatizaciones son finitas

“El endeudamiento es un recurso finito. Tú no te puedes endeudar infinitamente por más que seas hábil, todos tenemos una capacidad de crédito. La gente o no paga los impuestos o quiebras a la ciudad. Las privatizaciones son finitas”, expresó.

También señaló en ese orden de ideas, que los cimientos sobre los cuales se ha edificado el progreso de la ciudad empiezan a tambalear “porque ya llegaste al tope del endeudamiento, porque llegaste al tope de los impuestos con dos incrementos al ICA (Impuesto de Industria y Comercio) en menos de un año”.

Y planteó que en cambio, la generación de empleo, la reducción de la inseguridad y el turismo “te lleva al progreso”.

Samuel Tcherassi, quien ha apoyado a Char y ha hecho parte del unanimismo alrededor del mandatario local, cuestionó que haya más endeudamiento para hacer obras como el malecón del Suroriente.

Puntualmente se refirió al incremento del impuesto de Industria y Comercio, cuyo producido se tomará en parte para financiar proyectos como el mencionado.

“Hay que atender unos requerimientos, el Distrito tiene que cumplir con los compromisos. Pero no estoy de acuerdo en coger ese ICA para meterlo en otro malecón. Tú no puedes prestar plata para comprar lujos“, planteó.