*Cormagdalena declaró la caducidad de la concesión de este importante proyecto.
REDACCIÓN EL NORTE
Aunque se han cumplido casi todos los puntos establecidos en el Memorando de Entendimiento entre Barranquilla y la empresa asiática Power China para materializar el Superpuerto o puerto de aguas profundas, una decisión de Cormagdalena frena todo el avance.
La Corporación del Río Grande de la Magdalena declaró la caducidad de la concesión de este proyecto por retrasos en el pago de la contraprestación por el orden de los $1.300 millones al año.
Esta decisión facilita a la Alcaldía de Barranquilla el propósito de desarrollar una zona portuaria común de aguas profundas.
La caducidad no está firme, que faltan surtir los recursos de apelación que están evaluando interponer.
Para el gerente de Sociedad Portuaria Bocas de Cenizas, a cargo de la concesión, Rodney Castro, está decisión es consecuencia del nulo acompañamiento económico de la Nación al importante proyecto que sin apoyo gubernamental no será posible sacarlo adelante.
“Con esta caducidad se pierde toda la inversión y el trabajo desarrollado por los inversionistas. En nada queda lo que habían avanzado con nosotros, no sé qué rol jugarán ahora los socios de proyecto con la nueva idea de la Alcaldía”, precisó Castro.
Cabe señalar que a pesar del avanza del Memorando de Entendimiento, el proyecto del puerto de aguas profundas estaba frenado por una nueva iniciativa de la Alcaldía de Barranquilla, relacionada con un estudio contratado con la empresa internacional de consultoría en ingeniería Royal Haskoning DHV, para el reordenamiento de toda la zona portuaria de Barranquilla.
“Los socios del Superpuerto le han manifestado públicamente al alcalde Jaime Pumarejo, que les interesa que Barranquilla pueda tener su zona portuaria de aguas profundas y están dispuestos a hacer todo lo necesario para facilitarle al alcalde el desarrollo de su iniciativa de reorganización del sector”, expresó Castro Gullo.
La iniciativa de la administración distrital surge como una de las salidas a los constantes problemas de sedimentación que se presentan en el canal de acceso al puerto de Barraquilla. La idea es contar con una terminal marítima y fluvial que preste servicios a cada uno de sus puertos.
La propuesta contempla que la terminal de aguas profundas se integre a los terminales existentes y además abarca un plan de protección para la playa de la ciénaga de Mallorquín. “Esta es la manera de ver una terminal marítima que le preste servicios a todos los puertos de Barranquilla, y le permite al sector portuario seguir compitiendo en un escenario cada día más difícil. Y a Barranquilla, le permite seguir creciendo, generar empleo, ser una ciudad cada día más competitiva”, expresó el alcalde Pumarejo.
Según datos de la Administración Distrital, este plan incluirá las proyecciones de carga, un programa de inversiones portuarias para un periodo de 24 a 30 años, evaluación de impactos ambientales, definición de primera fase de expansión portuaria, determinación de ingresos futuros y factibilidad financiera de desarrollo del puerto, entre otros.
NO RIÑEN
Para el presidente del Comité Intergremial del Atlántico, Efraín Cepeda Tarud, la Zona Portuaria de Aguas Profundas es complemento de los terminales que están concesionados a las sociedades portuarias que operan a lo largo del canal de acceso, de manera que el uno no sustituye a los otros.
“De hecho, la propuesta presentada recientemente por el Distrito parte de ese concepto y por ello plantea que la terminal adosada al tajamar occidental opere para el atraque de buques de mucho mayor tamaño, para que otros aligeren carga allí y luego sigan su trayecto hacia los puertos actuales, o para que descarguen en barcazas o embarcaciones menores que luego llegarían a las concesiones que hoy están vigentes”, explicó el ejecutivo.
Añadió que en el Plan Maestro Portuario que financiaron en 2012 la Cámara de Comercio de Barranquilla, Cormagdalena y Asoportuaria se hablaba de esa complementariedad necesaria, y eso sigue vigente.
Cepeda Tarud considera que más que un ordenamiento portuario, es cuestión de definir un esquema que garantice una operación coordinada entre ese puerto de aguas profundas y las concesiones actuales. “Por eso la propuesta busca que las sociedades portuarias que operan actualmente participen del proyecto del puerto de aguas profundas en un modelo que haga viable el negocio para todos los actores de hoy y del futuro”, anotó.
LOS SOCIOS
El gerente de la Sociedad Portuaria Bocas de Cenizas, indicó que como socios del Superpuerto, además de Power China, empresa que está en capacidad de entregar la financiación del proyecto y la construcción del mismo; también está Impala, que tiene toda la intención de aportar carga y de manejar lo relacionado con la operación, además entrarían otros actores, pero ahora con la caducidad de la concesión, no se sabe qué pasará.
“Todos estos nuevos actores habían reiterado en la necesidad de que hubiera participación de los entes públicos, del Gobierno Nacional y de la Alcaldía de Barranquilla para poder materializar este proyecto, por eso comenzamos a desarrollar las mesas de trabajo con la Alcaldía para definir una estructura jurídica que permitiera dar el salto, un proyecto privado de economía mixta, de ahí que se organizó el Memorando de Entendimiento”, anotó Rodney Castro.
Recordó que la actualización de esta concesión y de la licencia ambiental quedó en firme hasta el año 2015. “Pero si se le suprimen los dos años de pandemia que han obstaculizado cualquier tipo de inversión, de desarrollo portuario, entenderíamos que realmente son muy pocos años en los que hemos estado mercadeando el proyecto, tratando de conseguir un socio estratégico que tenga experiencia portuaria, músculo financiero y lo más portante la carga”, afirmó.
IMPULSAR EL PROYECTO
Ante la decisión de Cormagdelena, el COO de Tecnoglass, Christian Daes, instó a empresarios y a los gobiernos local, departamental y nacional, a impulsar la construcción del puerto de aguas profundas, entendiendo que es proyecto que beneficiará la economía de la ciudad y ayudará a mitigar los problemas que se presentan en el canal de acceso al puerto por el bajo calado.
Anotó que con el puerto de aguas profundas sólo habría que dragar 600 metros para obtener profundidades de 65 pies.
“Nosotros estamos en la mejor esquina de Sudamérica y tenemos el segundo río más caudaloso de todas las Américas después del Mississippi y resulta que todo lo que Dios nos dio en Barranquilla que fue tener río y mar lo estamos desperdiciando”, expresó en un foro sobre la crisis sistemática del puerto de Barranquilla realizado en el Consejo Distrital.
Insiste en que momentos de unir esfuerzos para hacer realidad esta megaobra que además requiere de una importante vía de acceso, que tampoco se ha materializado.
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